El dolor menstrual no es normal

El dolor menstrual ¡No es normal!

Y merece una explicación

Cuando estudiaba la carrera, tuve una compañera de piso que cada mes, durante su menstruación, vivía momentos extremos: vómitos, diarrea, dolores de cabeza tan fuertes que la dejaban inválida. Ella misma me decía: “Es lo habitual, me pasa siempre.”


Años antes, mi tía me contó que sus reglas dolían tanto, que cuando dio a luz, ni se enteró del parto… porque aquello era “menos intenso y doloroso que sus reglas», cada mes, ¡increíble!

Historias que se repiten mucho más de lo que creemos, porque se acepta el sufrimiento menstrual como algo natural. Pero… no debería serlo.

Que tu médico de familia te diga: «Hay menstruaciones dolorosas y otras no. Te ha tocado la dolorosa, es sólo eso», es para… bueno, dejémoslo en un signo de ignorancia y que la acción ante esto sería cambiar de médico.

Vamos a intentar acercarnos un poco a comprender por qué duele los ciclos ovulatorios en la mujer.

Dismenorrea: ¿qué es y por qué duele?

La dismenorrea es el dolor uterino durante la menstruación, provocado por contracciones fuertes del útero y disminución del flujo sanguíneo uterino, mediadas por sustancias como las prostaglandinas, unas sustancias que produce tu cuerpo de forma natural, especialmente durante la menstruación. Actúan como mensajeros químicos y tienen muchas funciones, pero una de las más importantes es ayudar al útero a contraerse para que pueda desprender el endometrio (el tejido que se elimina con la regla).

Cuando hay un exceso de prostaglandinas, las contracciones son más intensas y dolorosas, y pueden causar otros síntomas como:

  • Cólicos fuertes
  • Náuseas
  • Diarrea
  • Dolor de cabeza


La dismenorrea:

  • Suele aparecer uno o dos días antes del sangrado, y durar entre 1 y 3 días.
  • El dolor puede ser sordo, pulsátil o cólico, y extenderse a espalda y piernas.
  • A veces se acompaña de síntomas como los citados en el párrafo anterior: náuseas, vómitos, diarrea o cefalea.

Aunque es común (60–95 % de mujeres lo sufren), en el 5–15 % es lo suficientemente fuerte como para impedir actividades diarias . Y ahí es cuando deja de ser “normal”.

¿Por qué duele tanto la regla? Causas

A. Dismenorrea primaria

Es lo más común y no remite a una enfermedad. El origen está en niveles altos de prostaglandinas (especialmente PGE2, PGF2α) que provocan contracción, inflamación y vasoconstricción uterina Sus detonantes incluyen:

  • Flujo menstrual intenso
  • Cuello uterino pequeño
  • Posición uterina “anómala”
  • Índice bajo de omega 3 frente a omega 6 en la dieta

B. Dismenorrea secundaria

Debido a patologías como:

  • Endometriosis (la causa más frecuente)
  • Adenomiosis, miomas, infecciones pélvicas, malformaciones

Se usa una distinción terapéutica: primaria (sin enfermedad), secundaria (con causa identificable).

Señales de que el dolor menstrual es una alerta

Ya hemos mencionado varios indicadores clave. Ahora vamos a desarrollarlos más en detalle:

  1. Endometriosis no diagnosticada
    Tejido endometrial que aparece fuera del útero, puede generar dolor pélvico crónico, infertilidad, diarrea, fatiga…
  2. Exceso de prostaglandinas inflamatorias
    Si la dieta es alta en omega 6 frente a omega 3, se produce más PGE2: más inflamación y dolor
  3. Déficit de magnesio, omega 3 o vitamina D
    • El magnesio relaja el útero y reduce prostaglandinas
    • La vitamina D y calcio bajos están vinculados a síntomas en la fase lútea y dolor
    • Los omega 3 promueven producción de prostaglandinas antiinflamatorias
  4. Inflamación crónica de bajo grado
    Arrastra dolor menstrual, fatiga y desequilibrios hormonales. Puede ser producida por varios o un conjunto de malos hábitos: nutrición, sedentarismo, alejarse de la naturaleza, relaciones tóxicas… y uno por encima de todos: el estrés.
  5. Fase lútea corta o ausencia de ovulación real
    Alteraciones hormonales que reflejan desequilibrios en el eje reproductivo
  6. Alteraciones en el eje HPG (hipotálamo–hipófisis–ovarios)
    Afecta la regularidad, fuerza del flujo y la producción hormonal. El eje HPG es la conexión entre tres partes de tu cuerpo que trabajan en equipo para regular tu ciclo menstrual y tus hormonas sexuales:
  1. Hipotálamo – El “director de orquesta” en tu cerebro. Le da la señal a…
  2. Hipófisis (o pituitaria) – Que actúa como “mensajera” y envía hormonas al…
  3. Ovario – Que responde liberando estrógeno, progesterona… y ovulando.

Cuando este eje funciona bien, tus ciclos son regulares, ovulas, y las fases hormonales están equilibradas. Pero cuando se altera (por estrés, inflamación, mala alimentación, falta de descanso, ejercicio excesivo o problemas metabólicos)… las señales entre cerebro y ovarios se confunden o se bloquean.

¿Qué podemos hacer para empezar a solucionarlo?

  • Identificar si tu dismenorrea es primaria o secundaria. Confía en un profesional actualizado para explora síntomas, historia y realiza examenes básicos
  • Ajustar la dieta: aumentar omega 3, magnesio, vitamina D; reducir omega 6 y ultraprocesados.
  • Apoyos naturales: suplementos de magnesio, calor local, ejercicio amable durante esos días, (aunque tendríamos que estudiar tu caso al detalle y ver lo que te hace falta a ti exactamente).
  • Investigar problemas subyacentes: endometriosis, miomas, malformaciones, etc.

El dolor menstrual no es una cruz que cargar, algo que te ha tocado, ¡pues vaya lotería! Es una señal del cuerpo. Un llamada para escucharlo y ver Qué Le Pasa.


Si estás harta de sufrir cada mes, es el momento de parar, mirar y buscar otras miradas, comprensión, conocimiento y soluciones.

Te invito a compartir este artículo en tu comunidad, a generar conciencia y empezar juntas el camino hacia ciclos más saludables, sostenibles y libres de dolor.

Si necesitas que te ayude, aquí estoy.
Mónica

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